¿Qué es?

Es la capacidad natural que todos los seres humanos tenemos para comunicarnos telepáticamente con los animales e intercambiar pensamientos, emociones, imágenes, sensaciones y energías. Esta conexión solo es posible de corazón a corazón o de espíritu a espíritu, o de chispa Divina a chispa Divina.

¿Para qué sirve?

• Para darle “voz” al animal y conocer y comprender sus sentimientos, conductas, estados emocionales y afectivos y necesidades.

• Para tomar medidas encaminadas a maximizar su bienestar físico y emocional

• Para mejorar la convivencia en el hogar y fortalecer la relación humano - animal

¿En qué casos es recomendable hacer una comunicación animal?

Siempre. A los animales les encanta expresarse…

· Si tu animal está presentando comportamientos o conductas inusuales o reactivas

· Si tu animal se ha extraviado o desaparecido (proceso especial)

· Si estás dudando sobre la pertinencia de aplicarle una eutanasia compasiva a tu animal

· Si tienes mensajes importantes que comunicarle

· Si solo quieres conocerlo un poco más para mejorar sus condiciones de vida

· Si ha trascendido y estás en un momento crítico del duelo (exclusivamente como parte de la terapia de contención en duelo animal)

¿Quiénes intervienen en la comunicación animal?

Para que esta herramienta terapéutica funcione para el mayor bien del animal -ese es su propósito- es necesario que participen comprometidamente:

1. El animal: da el permiso y expresa sus necesidades;

2. La comunicadora: hace de puente entre el animal y su responsable ya que escucha activamente con neutralidad, respeto, empatía y compasión; traduce a lenguaje humano lo que le comunica el animal, y lo transmite literalmente al responsable sin juicios ni interpretaciones, y 3. El responsable del animal: solicita la comunicación y actúa para atender las necesidades del animal con el fin de mejorar su bienestar.